Descubre la fibra soluble que te hace ganar bienestar

Los betaglucanos de la avena o los fructooligosacaridos, como la inulina que encontramos en las verduras o en las semillas del lino son un tipo de fibra soluble que mejora nuestra salud y bienestar. Se trata de un tipo de carbohidrato formado por cadenas de azúcares que están unidos entre si de un modo que nuestro organismo no puede dividirlos y digerirlos, porque no dispone de las enzimas digestivas necesarias.

Mayor bienestar

Aunque para nosotros las fibras solubles no son un alimento que nos aporte energía, sí que son un buen alimento para nuestra salud y sobre todo para nuestro bienestar intestinal. Por estas dos razones:

  • Estimulan el tránsito intestinal.
  • Promueven el crecimiento y desarrollo de una flora intestinal fermentativa (probióticos), y no putrefactiva.

La avena, el lino, la chía, plantas como el Plantago ovata y la setas, son excelentes fuentes de fibra soluble

Estimula la vida intestinal

La fibra soluble es el principal alimento de la flora intestinal fermentativa, y tomarla cada día es la mejor ayuda para conseguir una microbiota intestinal sana y beneficiosa, en primer lugar porque promovemos el crecimiento de la flora fermentativa: una ayuda para nuestro bienestar. Y en segundo lugar porque reducimos el desarrollo y multiplicación de las bacterias putrefactivas, que alteran la salud intestinal causando inflamaciones que podrían llegar a causar el desarrollo de otras enfermedades como el cáncer.

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Transito sin atasco

Otra buena cualidad de la fibra soluble es que ayuda a movilizar las heces, lubricando y protegiendo las paredes internas del intestino y ayudando a prevenir el estreñimiento.

Otras cualidades

Además de mejorar el transito y cuidar la flora intestinal, algunos tipos de fibra soluble han demostrado ser aliados de nuestra salud a otros niveles:

  • Fructooligosacaridos: mejoran los casos de inflamación intestinal, alivian los trastornos causados por antibióticos, contribuyen a reducir la osteoporosis, regular el metabolismo de los lípidos y los niveles de colesterol en sangre, y es un factor que ayuda a prevenir algunos tipos de cáncer.
  • Betaglucanos: ayudan a mejorar el transito, reducen la absorción de grasas y azúcar a nivel intestinal y regulan los niveles de colesterol en sangre.